Incontinencia urinaria, ¿por qué tabú?

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5 julio, 2019

Incontinencia, una palabra que suena como un obstáculo, una pesadilla para millones de personas en todo el mundo. Según las estadísticas, cerca de 10% de la población mundial sufre este problema, incluidos 600,000 portugueses, 33% mujeres y 16% hombres.

Problema? Vamos a desmitificar y entender la incontinencia.

Sinónimo de pérdida involuntaria de orina, la incontinencia es el efecto de la debilidad y el daño a los músculos de la uretra que pueden derivarse de causas como el parto, traumatismo, cambios hormonales e incluso el envejecimiento. Este fenómeno puede manifestarse en niños, adultos y ancianos, y las mujeres son las principales víctimas de este «fantasma».

Todos hemos escuchado escasos informes de sujetos que sufren de incontinencia, de personas mayores que evitan la vida familiar porque temen la reacción de los demás al olor de la orina o porque están involuntariamente «mojadas», mujeres que se abstienen de la vida social. Puede llevar a otros problemas como la pérdida de la autoestima, el deterioro de la calidad de vida e incluso la depresión.

¿Pero siempre tiene que ser así?

Es importante que las personas entiendan y sobre todo acepten la incontinencia. Yo diría que este es el primer paso para la cura porque existe. Esta cura debe estar en el nivel genérico, más allá de la cura de la pérdida involuntaria de orina, el descontento, la vergüenza, el miedo a lo que otros puedan pensar, la cura a nivel sentimental, la cura como un ser social.

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